Una vez tejidos todos los elementos de tus amigurumi, llega el momento de unirlos. Es posible que coser todos los elementos te parezca un reto al principio, pero es muy fácil y funciona mejor si te tomas unos minutos para planear exactamente dónde quieres coser cada pieza.
Cómo Coser las Piezas de Crochet
Lo más común es que tengas una pieza de crochet abierta (en este caso, la verde) con un hilo sobrante que puedes utilizar para unir dicha pieza al resto de tu trabajo (en este caso el rojizo).
Para empezar, toma el hilo con una aguja para bodar sin punta. ¿Te cuesta pasar el hilo por el ojo de la aguja? En lugar de pasar el extremo del hilo por el ojo de la aguja, haz un bucle con el hilo y pásalo por el ojo, te resultará mucho más fácil.
Decide en qué posición quieres coser la pieza de crochet (más adelante encontrarás más información al respecto).
Ahora pasa la aguja por el punto de la pieza de crochet roja por el que quieras empezar a coser la pieza verde, y deja que la aguja salga por un punto adyacente. Pasa la aguja y el hilo.
Ahora pasa la aguja por el punto de la pieza verde al que está unido el hilo. Pasa la aguja por ambos bucles desde dentro hacia afuera y tira bien de la aguja y del hilo.
Ahora pasa la aguja por el punto de la pieza roja por el que acabas de pasar la aguja y el hilo (el punto por el que acabas de pasar la aguja en la pieza roja).
A continuación, deja que la aguja salga por un punto adyacente y tira de la aguja y del hilo. Vuelve a pasar la aguja por el siguiente punto, de dentro hacia afuera, en la pieza verde y tira de la aguja y del hilo. No olvides tensar bien el hilo.
Continúa hasta que todos los puntos de la pieza verde abierta estén cosidos a la pieza roja.
El proceso sería algo así:
- Pasa la aguja con el hilo por el punto de la pieza roja por el que acabas de pasar la aguja.
- Pasa la aguja por el siguiente punto de la pieza verde, de dentro hacia afuera, y tensa bien el hilo.
- Pasa la aguja con el hilo por el mismo punto de la pieza roja por el que acabas de pasar la aguja.
IMPORTANTE: Recuerda siempre tensar el hilo. De lo contrario, es posible que queden huecos grandes entre las dos piezas de crochet.
Rematar
Cuando llegues al último punto de la pieza de crochet (la verde) que quieras unir a otra pieza (la rojiza), pasa la aguja una vez más de dentro hacia afuera por el último punto de la pieza verde. A continuación, pasa la aguja por el último punto de la pieza roja por el que has pasado la aguja y deja que salta por el otro lado de la pieza de crochet roja.
Tensa bien el hilo y córtalo cerca del punto por el que ha salido. Trabaja un poco la pieza de crochet con las manos para que esconder el extremo del hilo. ¡Listo! Has unido ambas partes.
Encontrar la Posición Perfecta
Es muy común coser una pieza en la posición equivocada y tener que retirarla, lo que ocurre principalmente cuando se cose sobre la marcha.
Para ahorrar tiempo y esfuerzo, te recomendamos que coloques la pieza que vas a coser justo donde quieres ponerla de antemano, y para que sepas exactamente dónde va, fíjala con un alfiler.
Otro truco que recordar es que el objetivo es coser cada punto de la pieza de crochet abierta a un punto de la otra pieza. Esto te permite determinar exactamente dónde debería coserse cada punto.
Cuenta los puntos en la pieza de crochet abierta, colócala sobre la pieza de crochet cerrada y marca cada punto con un alfiler. Retira la pieza cerrada y corrige los puntos que has marcado si tienes más o menos que los puntos que hay en la pieza abierta. Deberías tener el mismo número de alfileres que de puntos en la pieza verde.
Ahora cose la pieza verde a la pieza rojiza y retira siempre el alfiler del siguiente punto que vayas a coser.
Como alternativa, puedes pasar un hilo por cada punto que tengas que coser y luego sacarlo.
